SERIES NO-GRINGAS MUY RECOMENDABLES

Anfitrion: Sredni Vashtar

SERIES  NO-GRINGAS

MUY RECOMENDABLES

La cantidad de series de TV de la que disponemos, es  mucho mayor a la que tuvimos cuando niños  y jóvenes, señalando que prácticamente  todo lo que  podíamos disfrutar era  gringo (estadounidense) con algunas  notables excepciones (Dr. Who, Azabache,  Los  Profesionales, Las Aventuras de Saturnino, las series  japonesas en general, y un etcétera digno, pero imposible de  competir con el material useño).  Hoy, en cambio, poseemos  una gama importante de propuestas venidas de diferentes  partes del mundo y que hace años habría sido imposible  sospechar. Esta  posibilidad se debe en gran parte a la TV por cable, con su oferta de numerosos canales con propuestas tan variopintas como muchas veces discutibles en calidad como también en gusto.

En la avalancha actual de series quiero hacer notar sólo tres que me han impresionado  muy favorablemente y que no son de  origen gringo.

1. El Tercer Ojo (DET TREDJE ØYET): Un thriller noruego de lo más interesante. Lejano de las parafernálicas series gringas  donde todo pasa a ritmo de carrera, esta serie se da todo el tiempo necesario para contarte una historia que subyace sobre  un drama humano: la inexplicable desaparición de una niñita. Viggo Lust, el protagonista, esposo, padre y policía, sale con su hija (Christina) a la playa, entra durante menos de un minuto a una tienda a comprar unos chuches, pero al salir, su hija ha desaparecido. Nadie vio nada, nadie escuchó nada. Pasaron 4 años y el caso quedó sin resolver. Desde entonces toda la vida Viggo se va por la borda especialmente en lo matrimonial.  Luego de muchos intentos, Viggo comienza a aceptar que nunca encontrará a su hija y nunca sabrá qué pasó, pero entonces unos extraños sueños, relacionados con casos policiales aparentemente inconexos en los que aparece su hija como parte de ellos,  reavivan el fuego de la búsqueda.

Los eventos  irán  poco a poco entrelazándose y no pocas veces los compañeros de trabajo de Viggo, incluso hasta el nuevo novio de su mujer, estarán en la mira de las sospechas del atribulado padre.

En un final inesperado, Viggo logra averiguar qué pasó con su hija, dejando un camino lleno de agonía y de dolor, tanto para él como para los otros, pues el protagonista nunca midió las  consecuencias para llegar a su fin.

 2. Los  Misterios del Doctor  Blake: Desde Australia nos  llega esta joyita ganadora del premio “Screen Music Award” como el mejor tema para la televisión. Es una serie de época que nos sitúa en 1959 cuando el doctor Lucien Blake vuelve a Ballarat para hacerse cargo de la consulta de su padre, quien acaba de fallecer.

Sin embargo, entre las labores del médico del pueblo, está el de  asesorar a la policía en diferentes casos en los que su opinión como experto haga falta. Ahí es donde las habilidades de Blake comienzan a hacerse notar en crímenes que nada tienen que ver con los de las grandes ciudades. En efecto, un papá que teme por la dignidad de su hija, alguna infidelidad, el vecino que comete un error con algún producto químico, alguna herencia de por medio. Nada sofisticado, pero lo suficientemente interesante como para entrar en la trama  y, poco a poco, ir  encariñándonos con unos personajes entrañables y de paso conocer algo del pasado de Lucien, quien tiene mucho que  contar. Además se descubre  una conspiración del ayuntamiento que desea sacar a Lucien no sólo de la policía sino también  de  la función médica.

El romance no está ausente, pues, dentro de las fatigosas relaciones humanas del buen doctor, hay  una que va creciendo  poquito a poco y que  termina por trepidar al final de la 3º temporada. Se trata de Jean Beazely,  amiga, confidente, cómplice y ama de llaves, verdadero apoyo de Blake en su lucha contra crimen.

   

3. Los Informáticos (The IT Crowd): Para  los que gustan del humor un poco más sofisticado, pero a la vez más natural que  las situaciones imposibles que presentan los gringos; para  aquellos que prefieran el “absurdo inteligente” que el “absurdo idiota” les sugiero esta serie británica ya medio olvidada que conocí gracias al bloguero y escritor Miguel Acevedo.

La serie trata de los 3 miembros de la sección de informática (Roy, Moss  y Jen) de una mega empresa. Los protagonistas son  de lo más ridículos lo mismo que otros personajes recurrentes.  La parodia está servida con tres sujetos que  lo tienen todo para ser triunfadores  pero que son el hazmerreir de toda la empresa.

Inolvidables son los capítulo de los “Fontaneros del Infierno”,  o aquel en que deciden ir a un musical gay. ¡Destornillante!

Mención aparte para el dueño de la Compañía que es la  ridiculización de los empresarios “creativos” y “vanguardistas”. Memorable es su estresante campaña anti-estrés o el intercambio de regalo entre la delegación japonesa de una  importante firma (quienes le regalan una valiosa espada samurai) y el suyo (que fueron un par de “bototos” de doble costura).  También hay que recordar a Richmon, un gótico quien fue exiliado a trabajar oculto en los servidores por su afición a Rock gótico. 

Hay más,  muchas  más, como la  anglo-franco-germana "Crossing Lines"; o la australiana "The Code"; también  las  británicas  "Intruders" y "Broadchurch"; la  canadiense "Los Misterios de Murdock" y tantas  que  no  es  posible  nombrar, sin embargo, las tres  aquí tratadas, son un ejemplo  de  buenas  alternativas  a la  máquina  gringa y que  pueden  ser fácilmente  encontradas. Muy recomendables.

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