miércoles, 15 de junio de 2022

 Un Carcamal

               El

Aporte

Del

Amanuense



¡Te casaste con un carcamal!

          Un reencuentro puede ser una ocasión muy especial. Las personas se ven, se sorprenden, se alegran y de pronto una cascada maravillosa de recuerdos, parabienes y felicitaciones se desbordan en una conversación que parece no tener fin, todo, claro, directamente proporcional al tiempo de la lejanía. Y pudo contemplarlo de primera mano, cuando en una cafetería, disfrutando un delicioso capuccino, presencié cómo dos amigas, por mera casualidad, coincidían en el local iniciando un filón de risas, preguntas y respuestas. Todo parecía muy bien. Todo bien hasta que… Alcancé a escuchar que una de ellas le decía:

-¡Y este es el afortunado de mi marido! ¡Ya llevamos cuatro maravillosos años!

La joven mujer, alargó su móvil con la imagen del príncipe azul y de pronto, la amiga exclamó, estoy seguro, sin pensar:

-¡Pero si te casaste con un carcamal!

La mujer casada que con tanto orgullo compartía el rostro de su bienamado, se enojó muchísimo, se puso de pie y se retiró ofendidísima. La amiga debió pagar la escueta cuenta de un par de cortados con unos pastelillos.

Lo que me molestó de toda la escena es que yo desconocía el significado de la palabra “Carcamal” cuando era evidente que las dos examigas sí la conocían. De inmediato, tomé mi móvil y entré a la RAE. Tal vez había cierta posibilidad de que se trata de jerga. Y aquí ocurrió un error afortunado, pues, por la premura tecleé “carcamam” y la Rae me arrojó dos palabras posibles: “Carcamal” y “carcamán”. Rápidamente me dirigí a la primera. El resultado fue:

Carcamal

1. m. despect. coloq. Persona decrépita y achacosaU. t. c. adj.

        Carcamán,a

1. m. y f. coloq. Persona de muchas pretensiones y poco mérito.

     En el primer caso, lo más obvio es pensar en el señor Burns de “Los Simpsons”.  Y para el segundo caso, bueno, hay un largo etcétera en la política (nombrarlos me llevaría mucho tiempo).

       Ahora bien, luego de la investigación, comprendí a qué se debió el enojo de una de las amigas. No obstante, obtuve un doble premio al conocer estas palabras.

 ¡Hasta la próxima!